sábado, 25 de marzo de 2017

PRINCIPIO Y FINAL


La aparición del egoísmo consciente,
despierta mi verdadero conocimiento.
Y el conocerte me duerme, 
como un opio infusionado
en flor de tilo con agua del Carmen.
Volamos como luciérnagas,
sin darnos cuenta
que somos polillas de armarios viejos,
cegadas, atraídas hacia una luz
que esconde el chasquido
del final de la historia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario