miércoles, 7 de octubre de 2015

Pero ¿tú que te has creido?



Pero ¿Tú que te has creído?
Deja ya de aguantarme la mirada, que siempre pierdo.
Basta de apoderarte de mis pensamientos y de mis descansos,
que seguro que tengo más cosas en las que pensar.
Ya te tengo aquí otra vez. ¿Tú ves?. No me dejas ni escribir.
En cada cosa que hago apareces. Me sonríes y dices algo que me pincha
y me mantiene enganchada.
Intento mantener distancia, pero es imposible.
Conviertes mi razón en sinrazón, mis decisiones en tuyas y mi control en descontrol.
Tu indiferencia me alivia lo mismo que me da rabia.
Tu acercamiento me distrae y me atonta.
Cuanto más cerca te tengo, más lejos te veo.
Sigue así, sigue...El día menos pensado te irás de mi cabeza y entonces...
Entonces ya veremos como descanso, en que pienso y que escribo.
No dejes de aguantarme la mirada, estoy practicando para ganarte.

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